Noche puta... Regalada,
que no vacilas en
complacer a quien a tu
itinerante preferencia
le sienta.

¿Quién será esta vez
el que sane el ardor
de tu entrepierna?
¿De quien será la
saliva que lubrique
tu decadente cuerpo?

¿De quien serán los ojos
a los que mentirás
continuamente?
¿De quién el aliento
que respirarás?

Noche puta... Impía.
Noche al fin.

3 comentarios:

natymarenco dijo...

Claramente Noche al fin!!!!!!!

Anónimo dijo...

Me llaman noche

A dijo...

Alguna vez dije que este texto tenía un aire a un coterráneo poeta maravilloso y degenerado que dejo describió lo que era casi obsceno.